Bienvenidos

Bienvenidos a mi blog personal.
Me llamo Fran y soy Pescador Submarino.

La idea de este Blog es tener mi propio rinconcito donde ordenar todo mi material para poder compartirlo con los amigos y compañeros de este mundo de la pescasub.

Hay contenidos en relación con el material de pesca y diversas adaptaciones que yo hago, pruebas etc (M). También hay relatos de jornadas de pesca (R) y por supuesto también me haré eco de las noticias (N) publicadas por la Asociación de Defensa de la Pesca Submarina (ADECASUB) , de la cual soy presidente en la actualidad.

Siéntete libre de comentar todo lo que te parezca oportuno.

Saludos y Bienvenido

28 julio 2005

(R) Impresiones de un Medi en el Atlántico

Estaba totalmente impaciente por que llegara el momento de meterme en las aguas atlánticas y finalmente llegó. Todos los comentarios anteriores, hablando con fabi por teléfono, y luego allí antes de meternos eran un cúmulo de sensaciones e impresiones difícilmente asimilables. Por un lado que si estaba fría, muy fría y que no había pescao, que si el mar iba a estar tranquilo, que si la marea tal y cual y eso hacía que había que pescar de tal forma... en fin un montón de información muchas veces contradictoria que no hacía más que impacientarme por entrar a pescar.

El sábado por la mañana el mar amaneció tranquilo, la marea estaba baja (se supone que eso es malo, creo) y el agua estaba algo turbia. Por fin llegamos al primer sitio, Raúl es el primero que entra al agua, seguido de Alvaro y de Fabián... yo como siempre, el último. Tranquilamente me termino de ajustar los guantes, me pongo las aletas, cojo mi asso y al agua... la primera impresión: ¡¡coño!!... ¡¡es VERDE!! en esa zona el fondo distaba unos 8 o 9 metros y, por supuesto, no se veía pues no había más de 4 o 5m de visibilidad. Me acerco a la pared y poco a poco voy viendo como el fondo va subiendo y se van distinguiendo como unos puntos blancos que se mueven acompasadamente con la marea: Laminaria, bueno, los puntos blancos son una manchas que salen sobre las hojas de la laminaria. Intento asimilar la nueva situación mientras que voy llegando ya a la pared, que también está tapizada completamente de laminaria... a todo esto todavía no había cargado el fusil... así que me pongo lo cargo con el consiguiente lío de cuerdas que se origina pues llevaba mucho nylon en el asso. Ya estabilizado oigo como me llama Fabi... "Fran, vente para acá!!" (con un acento muy marcado) llego a su lado y me dice, mira, hay que bajar y acechar las puntas entre la laminaria de forma que cuando llegues al final te paras un poco y a lo mejor te sale alguna mojarra buena... (fácil no?) le dejo mi asso para que lo pruebe y me muestra cómo lo hace él... baja y veo como sus aletas desaparecen entre el densísimo bosque de laminaria... las sigo poco a poco desde la superficie y veo como, efectivamente se para antes de llegar a la punta, al poco veo asomar mi asso por delante como apuntando a algo, pero desiste y sube con una sonrisa... "estuve a punto de estrenarte el asso!! me salieron dos sargos muy buenos"... Es mi turno ahora... me relajo un poco como puedo entre el baivén de las olas y la espuma de la rompiente y bajo hacia un muro de hojas de posidonia... ¿y por donde se entra aquí?... con cierto repelús me hago paso entre las hojas y un metro más abajo veo ya la roca... me poso como puedo y quedo fascinado por un bonito paisaje submarino. cientos de tallos de laminaria ascienden por todos lados hasta formar un techo uniforme y denso que se mueve con el oleaje pero creando un microsistema de tranquilidad bajo el. La tranquilidad es apartente pues en la siguiente tanda de olas me tengo que agarrar a los fortísimos tallos para no perder el equilibrio. Sin embargo observo con fascinación que hay un par de maragotas que me observan a pocos metros de mi. En estas me acuerdo de que fabian dijo que había que moverse y avanzar lentamente hacia la punta donde seguramente comerían los sargos... pero mi apnea está agotada y tengo que volver a hacerme paso entre la laminaria para subir de nuevo... Al llegar arriba vuelvo a sentirme agitado por el oleaje y la espuma. Saco la cabeza y veo que fabian ya ha avanzado un par de decenas de metros y se sumerje de nuevo más delante, más cerca de la punta (que pillín... :wink: ) cuando sale le comento que bajé y tal, pero que no podía avanzar debido a la gran densidad de tallos.. que ni siquiera había posibilidad de maniobrar con el fusil para apuntar a algo que se pusiera a un lado... me dice, claro, es que hay que buscar los canales entre la laminaria, verás como por ahí puedes avanzar fácilmente... aaahhhhh... vale.. que hay canales.. ok... busquemos esos canales...

Sigo nadando y fijándome en el fondo veo que con el baiven de las olas queda al descubierto la roca en un palmo cuadrado... por ahí no quepo, pienso yo, pero bueno, probaremos... Bajo y efectivamente... es un canal.. ahí si que se puede nadar un poco... y avanzo lentamente poco a poco de laminaria en laminaria observando entre los troncos por si surgiera algo interesante... al finalizar la apnea me parece ver algo que pasa ágilmente entre los troncos... pero no consigo ver que es. Sigo así un rato más, haciendo bajadas, y buscando canales pero sin lograr tener nada a tiro. Finalmente veo que ya se están subiendo a la barca y decido hacer la última y ya descargar el asso. Localizo un canal de esos en una piedra plana y me introduzco en el bosque, avanzo y veo que la laminaria se acaba de golpe, pues hay un escalón importante de unos 2'5 o 3 metros de alto, me asomo lentamente y distingo el fondo, ¡¡y dos sargos!! que comen en la pared a un lado mío... no parecen muy grandes, o están muy lejos... pero bueno, tengo que descargar el asso así que me pongo, apunto a uno de ellos (el que no tiene roca detrás) y "CLONK!!" (sonido de disparo del neumático) en medio milisegundo la varilla estaba ensartada en el sargo que no solo no era pequeño, sino que estaba a tomar por culo!! ... joer que ilusión!! mi primera captura atlánticaaa!! y además ya quisiera ver yo más a menudo sargos de esa talla por el mediterráneo!!

El resto de la jornada transcurrió de manera parecida, cambiando de sitio de vez en cuando buscando las puntas más adecuadas según el criterio de Fabian y haciendo piezas (algunos más que otros) yo conseguí dos piezas más de igual porte en condiciones muy similares y finalmente un pinto precioso (por el color, de tamaño justito) Y para finalizar, un acecho que no creo que olvide nunca... a unos 10 metros de mi, más adelante una punta muy interesante... justo debajo mío veo un canal de esos... "perfecto"... cojo todo el aire que puedo y me sumerjo... avanzo lentamente, muy poco a poco por una pared casi casi vertical (es decir, con la laminaria casi paralela al fondo) cuando estoy cerca del final me paro, saco un poco el fusil y lentamente poco a poco asomo la cabeza veo que hay muchas hojas de laminaria y entre ellas.. ¡¡ UNA SARTEN !! QUE PEDAZO DE SARGO!! inmóvil... no se había dado cuenta de mi presencia... lentamente le enfoco con el asso, simplemente alucinante, ni se mueve... ¡¡CLONKKKK!!

La jornada finalizó ahí, yo conseguí 5 piezas y álvaro otras 5 entre las que destacaba un abadejo chulísimo y otro sargo sartenero al que dejó literalmente empalado de frente.

La segunda jornada fue distinta, sólo nos metimos a pescar Alvaro y yo y Fabi nos hizo de barquero por que estaba muy cansado ya que llevaba toda la semana a un ritmo muy fuerte. El mar estaba algo más movido y la marea era alta, en teoría eran condiciones muy buenas para ver "muxo peixe".

Las condiciones sin embargo para mi al menos no eran las más adecuadas ya que tanta espuma no me dejaba concentrarme bien y estaba demasiado preocupado por "donde andan esas piedras llenas de afilados mejillones..." y me agobiaba enseguida por lo que no fue demasiado fructuosa aunque alguna pieza cayó... Recuerdo con gran satisfacción un buen sargo que pesqué en una punta que pegaba mucho el mar, no se como conseguí plantarme en la laminaria que estaba a dos o tres metros por debajo de la superficie (marea alta) y desde allí, con el empuje de las olas conseguí acercarme a la punta donde pude flipar al ver como un grupo bastante numeroso de sargos grandísimos hacía lo imposible por arrancar algunos mejillones... al darse cuenta de mi presencia emprendieron la huída desesperada y los veía pasar delante mío sin saber a cual apuntar, ni como, pues el mar movía mi asso como si fuera un alfiler... en estas que uno de ellos, que al parecer estaba más cerca de mí empieza a salir y por un momento se ve sorprendido momento que aprovecho para dejarlo tiesssiiisisisisiisimo con un certero disparo en toda la columna, la inercia de la varilla de 8mm se encargó de fulminarlo a pesar de disparar con el reductor de potencia (siempre pesqué con el puesto por que me sobraba potencia por todos lados y así era mucho más fácil de cargar puesto que no necesito ni cargador ni nada).

Finalmente Fabi nos llevó a una ensenada un poco más tranquila donde pudimos grabar algunos vídeos y donde conseguí atraer a una lubinilla no muy allá tras una espera bajo la espuma.

Antes de subirnos a la barca Alvaro emergió de repente gritando y blasfemando de todo pues al parecer bajó a la laminaria y se encontró con dos "robálos" de buen porte "DEMASIADO CERCA" y no pudo maniobrar a tiempo... Una buena finalización de la jornada que nos deja un agradable y adictivo sabor de boca que sin duda nos hará volver en otra ocasión.